¿Qué está de moda en eventos?

¿Quién se atreve a responder esta pregunta?:

¿Qué está de moda en eventos? 

Para quienes esporádicamente asisten a una fiesta,  cualquier detalle puede resultar novedoso.

Si el tradicional ramo de novia se arroja desde un balcón no es lo mismo que si la novia lo lanza desde la ventanilla baja del auto ni bien abandona la iglesia.

"Está de moda" sostenía una señora con certeza, al ver al novio pasar de mano a mano la ya tradicional, caja de bebida, sobre la cual los hombres invitados a la boda se agolpaban cual jugadores de rugby sin importar nada más que obtener el premio.

Al encender cada uno de los elementos luminosos para la tanda láser, las personas mayores dudan, entre risas y miradas de reojo para ver quién logra encender los anteojos en plena oscuridad.  Mientras los rayos del láser encandilan, se prenden y se apagan, un hombre  que hace rato superó los setenta años sostiene con firmeza "Estas cosas modernas no son para mí, en mi época esto no estaba de moda" 

Sin embargo, gracias a internet, las importaciones, los sectores que imponen elementos por marketing, etc.,lograron que muchos parecieran estar orgullosos de haber impuesto ciertas modas. 

Definitivamente el momento de las ligas quedó atrás,  la destrucción total de la torta luego de haber sido atacadas por una veintena de mujeres en busca del anillo y otras tantas costumbres también. Sin embargo la madre de una quinceañera, me comentó recientemente, la elección de una torta “rellena de anillos” para que las solteras encuentren el suyo y se colmen de crema en la búsqueda.

Pudiendo distinguir moda de costumbre, tarde o temprano pasa el furor y el capricho de algunos, para darle lugar a la lógica y el sentido común.

Así poco a poco algunas costumbres insólitas dejaran de ser moda para dar paso a otras (que esperemos sean) menos peligrosas, caras o absurdas. 

Para causar sorpresa, alegría y un buen recuerdo no es necesario apelar a modas que no se comprenden, no tienen sentido y que se repiten en todos los evento, por lo tanto se pierde uno de los puntos fundamentales de una buena celebración: la originalidad.

De todos modos, cuestiones como  el buen gusto,  la sensatez y el ahorro, en eventos, no pasan de moda.