¿Qué significa el "fantasma del fracaso" para el organizador de eventos?

Enfrentarse al "fantasma del fracaso", para cualquier organizador de eventos no resulta tarea sencilla. 

Es que  en la sociedad actual, son muchas las cuestiones que debemos sopesar a la hora de organizar un evento:

distancia,  
inseguridad,
valores y costos,
concurrencia,
adhesión de auspiciantes,
 interés, etc.

Si sumamos estos factores a una situación económica inestable, es lógico que esa preocupación por la cancelación del evento resulte cada día más grande.

Bien sabemos que no es la preocupación lo que debe alertarnos, sino precisamente ocuparnos para minimizar los riesgos, buscando que el evento en cuestión se lleve a cabo tal cual se presentó en nuestra mente, canalizando los aspectos que podrían llegar a resultar negativos.

Actualmente existen varias herramientas que además de estimar la concurrencia  del público a un determinado evento, nos permiten disminuir aquellos aspectos que causan mayor escepticismo.



Pareciera que el organizador que no vivió esa situación típica que presenta la planificación de un evento cuyo resultado no se sabe cuál es, no tomó conciencia de la complejidad que conlleva la tarea.

Es que además de los factores que pueden hacer tambalear nuestro proyecto o idea, su éxito o fracaso, etc.,  se pone en juego la credibilidad del organizador, su trayectoria y una lista de aspectos que inmediatamente se vincularán con su persona.



Mi frase de cabecera: “Celebra poder celebrar” también busca alentar a aquellos con los que comparto la maravillosa tarea  de planificar, de organizar eventos. Para incentivarlos a celebrar cada triunfo, luego  de los acontecimientos.  Ya que si bien algunos de ellos pudieron ser concebidos con cierto recelo,  la mayoría  nos dan la certeza  del éxito junto con la satisfacción  de haberse llevado a cabo.